Hay bastantes personas asustadas con el falso presagio del fin del mundo, por eso, haz esta siembra:
Irradia confianza y lleva a todos un mensaje de fe y de serenidad. Enciende lucecitas de esperanza.
Habla de un Dios de amor, no de un juez implacable y menos de un Dios al que hay que temer.
El temor a Dios es un tema del Antiguo Testamento, no del Nuevo, porque "Dios es amor": 1 Juan 4,8. Quien ama, no teme.
Fortalece la fe de los débiles ya que cuando la fe es grande, el miedo es pequeño o desaparece.
Relájate, ora mucho y envía luz, sanación y armonía a todos y al Universo. Repite: Todo va a estar bien.
Invita a los demás para que hoy y mañana 21, oren con fe profunda y se conecten más con Dios y los ángeles.
Prende velones y decreta que la luz de Dios aleja los miedos, repite mucho: "Señor, eres mi Buen Pastor, confío y nada temo porque estás conmigo".